lunes, 24 de abril de 2017

Rollitos de Canela Literarios


¡Hola a todos!

Cuando me uní al club de lectura, hace ya más de un año, quería hacer algo para compartir con ellas en una de nuestras juntas. Tenía que ser algo para acompañar el té y pensé que unos rollos de canela caseros sería una buena idea. ¿El resultado? Los rollitos de canela son ahora la bandera del club de lectura. 
Por eso, en esta entrada quiero compartir con ustedes la receta de mis famosos rollitos de canela literarios, que es una variación propia de una receta que encontré en Internet hace mucho tiempo. Es una receta para nada cara y, personalmente, creo que menos pesada que otros dulces, porque no lleva tanta grasa y se usa azúcar morena, que es menos refinada que la azúcar blanca de mesa.

Para medir las cantidades, les recomiendo comprar un set de medidas estándar. Las pueden encontrar en cualquier supermercado o tienda especializada, no son caras y si les gusta la cocina, y en especial la repostería, van a poder usarlas en todas sus preparaciones.

Ingredientes:

De la masa:

  • 2 cucharadas de levadura en polvo
  • 2 cucharadas de azúcar blanca 
  • 1/2 taza de agua tibia
  • 6 tazas de harina sin polvos de hornear y tamizada
  • 2 huevos
  • 1/2 taza de margarina derretida
  • 1/2 taza de leche 
  • 1 cucharada de esencia de vainilla
  • 1 cucharadita de sal

Del relleno:

  • 6 cucharadas de canela en polvo
  • 1 taza de azúcar morena o rubia
  • 1/2 taza de margarina derretida

Preparación:

En el bowl redondo más grande que tengas, mezclamos la levadura en polvo y el azúcar blanca. Luego agregamos el agua tibia (que debe estar un poquito más caliente que tibia), disolvemos todo hasta que no queden grumos y dejamos reposar todo por unos 10 minutos con el bowl tapado para que "suba".

Pasado los 10 minutos, la mezcla debería haber fermentado y subido al doble. Si crees que no ha subido lo suficiente, puedes esperar un poco más. En mi experiencia, si la mezcla no fermente bien puede ser por dos motivos. Uno, porque el agua está demasiado fría o dos, porque la levadura no es fresca. Siempre puedes rehacer este paso.

Cuando la mezcla anterior haya fermentado bien, estamos listos para hacer la masa de los rollitos.
Sobre lo anterior, agregamos ahora el resto de los ingredientes: los huevos, la mantequilla derretida, la cucharadita de sal y la esencia de vainilla. Recomiendo poner la mitad del harina y la mitad de la leche; revuelve todo con una cuchara grande para incorporar bien todos los ingredientes. Cuando la masa se rebele contra la cuchara, usamos las manos e incorporamos poco a poco el resto del harina y la leche. Amasamos con ganas. El resultado debe ser una masa homogénea, húmeda y elástica que se despegue del fondo del bowl.
La masa básica ya está lista. Ahora aceitamos un poco el fondo del bowl para que la masa no se pegue y la dejamos reposando y tapada (tal como en un principio lo hicimos con la levadura) por 90 minutos. La levadura hace efecto y pasado el tiempo, la masa dobla su tamaño.


Antes del reposo.
Después de los 90 minutos de reposo.

















Cuando la masa esté hermosa y lista para continuar, la sacamos del bowl. Quizás baje un poco, pero eso es normal cuando "le entra aire". Enharinamos la mesa y un uslero para que la masa no se pegue y empezamos a trabajar con ella. Yo divido la masa en dos porciones, porque es más fácil de manipular con el uslero, pero si eres más hábil en la cocina y tienes una superficie grande para trabajar, quizás puedas trabajar toda la masa de una sola vez.

Usando el uslero, la extendemos de forma rectangular (unos 30 cms de alto) y tan larga como se pueda. No puede quedar tan delgada, que tenga como mínimo medio centímetro de ancho.

Mi intento de rectángulo. Dividí la masa en dos para trabajarla con más comodidad.
Aquí es donde hacemos la mezcla del relleno.
En una taza o bowl pequeño, ponemos la medida de azúcar morena, la canela en polvo y revolvemos con cuidado (la canela en polvo es muy fiao y puede molestar en la nariz y los ojos).
Con una brocha (o una cuchara si no tienes una brocha de silicona) pintamos muy bien la superficie de la masa con la mantequilla derretida y luego la tapizamos (¿?) con la mezcla del azúcar y la canela hasta que esté completamente cubierta.

Y ahora comenzamos a enrollar. 
Siguiendo la imagen de arriba, comenzamos a enrollar desde abajo hacia arriba (aquí hay un ejemplo), apretando con los dedos a todo lo largo para que el rollo quede lo más compacto posible y para que cuando lo cortemos más tarde no vayan a desarmarse.
Cuando el rollo esté listo, calculamos al ojímetro cuál es la mitad y cortamos con el cuchillo. Partiendo de uno de esos extremos recién cortados, comenzamos a cortar nuestros tubos de masa para sacar los rollitos. Idealmente, cada rollito debería ser de unos 3 ó 4 centímetros de ancho. Los ponemos en una lata de horno enmantequillada para que no se peguen y los tapamos con papel de aluminio para dejarlos reposar una hora. En este tiempo, los rollitos volverán a subir por acción de la levadura, así que no pueden quedar muy juntos en la lata porque pueden pegarse unos a otros y despegarlos hará que se desarmen.

Pasada la hora de reposo, quitamos el papel aluminio y llevamos los lindos y gordos rollitos de canela a un horno precalentado y los horneamos a unos 200° por 25 minutos aproximadamente. Te recomiendo que vigiles constantemente los rollitos para que no vayan a quemarse, la masa es delgada y la mantequilla del relleno ayuda a que se horneen rápido.

Cuando estén listos, apagamos el fuego y los dejamos reposar en el calor del horno por unos cinco minutos más. Te recomiendo que no los dejes enfriar en la lata del horno a temperatura ambiente, porque con la mantequilla y el azúcar se forma una especie de caramelo bajo los rollitos que es muy difícil de quitar cuando se enfría.

¡Ya puedes disfrutar tus rollitos de canela literarios! A veces me gusta calentarlos un poco para que el olor de la canela y el azúcar se haga más intenso antes de comer y porque soy muy golosa.

¡Y los rollitos literarios ya están listos!
Puedes disfrutar los rollitos solos o con un poco de glaseado de galletas (el que se prepara con claras de huevo, azúcar flor (o gas) y jugo de limón. Son el acompañamiento perfecto para una taza de té o café mientras disfrutas de un buen libro.

Espero que les haya gustado la receta y que no les haya parecido tan difícil de preparar. Cualquier duda, pueden dejarla en los comentarios.

¡Hasta la próxima!

2 comentarios:

  1. me dio hambre solo con ver la foto TT.TT ... y aprox para cuantos rollitos alcanza la mezcla? Me encantó la receta :3

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    1. ¡Hola!

      Yo soy muy exagerada, así que hago muchos, y esta mezcla alcanza para entre 20 y 30 rollitos. Pero yo los hago pequeñitos, casi como bocaditos.
      También la cantidad de rollitos depende del grosor de la masa y de cuándo la extiendas. Si quieres rollitos más gruesos y grandes, te resultarán menos.
      Si usas la receta, cuéntame cómo te resultó. :)

      ¡Cariños! ♥

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